Los cuervos

También tienen una pésima fama los cuervos, ya que todo el mundo habrá escuchado el famoso refrán de “cría cuervos y te sacarán los ojos”. Esta frase es atribuible a Don Álvaro de Luna, un condestable que se encontró con un mendigo al que un cuervo, que el propio mendigo había cuidado, le había sacado los ojos. El hecho es que, por aquel entonces, estos animales solían alimentarse de los condenados que habían sido ahorcados, y lo primero que empezaban a comer estas aves eran las partes blandas del finado, es decir, sus ojos.

Por otro lado, la presencia de los cuervos en guerras o en escenas de muerte, unido a su apetito carroñero, han convertido al ave negra en un heraldo de la muerte. Las supersticiones populares los asocian con malos augurios y con la muerte, haciéndolos temidos y respetados. De hecho, soñar con cuervos anuncia la muerte de alguien, una enfermedad grave, una depresión o una gran crisis (http://www.mis-suenos.org/interpretaciones/buscar?text=Cuervo+muerto+).

También, en numerosas culturas como la nórdica, los cuervos eran venerados como símbolos espirituales; e incluso los círculos de ocultismo hablan sobre la participación del cuervo como un guía de las almas de los muertos al otro mundo (http://www.escalofrio.com/n/Misterios/Leyendas_de_Cuervos/Leyendas_de_Cuervos.php). Así nos lo describe Edgar Allan Poe, como un ave "de mal agüero", que actuaba como un mensajero sobrenatural: "Aún con tu cresta cercenada y mocha -le dije-, no serás un cobarde, hórrido cuervo vetusto y amenazador, evadido de la ribera nocturna".


El cuervo común (Corvus corax), es un ave extremadamente oportunista, de amplia distribución en todo el hemisferio norte, y los científicos han comprobado que poseen una inteligencia excepcional, ya que incluso son capaces de utilizar herramientas para resolver problemas. Sin embargo, debido a estas malas ideas que surgen sobre él, cada vez es más habitual encontrarlos de la siguiente manera:




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